Tras la victoria conseguida en Portugal por la Champions League y el conocimiento de la derrota del Napoli frente al Atalanta, la Juventus recibió en Turín al debilitado Empoli, que lucha por mantenerse en la máxima categoría del Calcio.
La fórmula del Pipita disfrazado de abastecedor para la persistencia del croata aparentaba ser la clave para quebrar el cero, pero la falta de efectividad del ex Atlético Madrid mantenía con vida al elenco de Martusciello. El margen de paciencia se iba agotando a medida que se acercaba el descanso. Para la segunda etapa el entrenador analizaba varias modificaciones para llegar a la red adversa.
En el complemento Mandzukic se tomo revancha y después de un preciso centro del volante colombiano impuso el 1 a 0 con un violento cabezazo que dejó sin posibilidades al arquero. El grito de desahogo en las tribunas fue una muestra del sufrimiento que se vivía en el estadio. El líder no podía perder puntos en su casa.
Con la ventaja adquirida, una notable combinación sudamericana sirvió para extender la diferencia. Dani Alves, Cuadrado y Alex Sandro fueron los autores de la gesta para que el 2 a 0 despeje cualquier tipo de dudas. Fiel a su estilo, la Juventus ganaba sin brillo, pero con mucha autoridad.
Con la posibilidad de conseguir la Triple Corona, el combinado de Allegri tendrá que afrontar su próximo compromiso el martes por la Copa Italia frente al Napoli. De vencer a los sureños, los de Turín se consolidarán como serios candidatos a repetir lo que alguna vez logró el Barcelona, el Bayern Múnich, el Inter, el PSV, el Celtic, el Ajax y el Manchester United.
GG
