Practica el perdón

Algunas disciplinas, la práctica del perdón, la llevan adelante mediante conceptos que tienen bases religiosas. Yo lo que te propongo es un ejercicio diario y más ágil al momento de ejecutarlo.

Esta práctica que te acerco no tiene que ver con que debes estar sin ningún tipo de reacción hacia las cosas malas que alguien te hace, ya sea de forma intencional o sin querer.

El perdón tiene como base la conexión que tienes contigo. Esa conexión interna te hace estar presente en las situaciones que vives y con las personas que rodean esa situación.
Esto te ayudará a distinguir entre una buena persona que se equivoca y realiza una mala acción, con otra mala que se equivoca y hace una buena acción. Esta práctica del perdón también tiene un parte de aceptación de lo que se te presenta.

Esta parte debe tener su lógica medida, porque tampoco puedes ir por la vida aceptándolo todo sin accionar.
Pero al estar en conexión contigo, al estar 100% presente con lo que te sucede y con las personas que te rodean, te facilita la tarea de la aceptación para saber cómo accionar.

Y esto último no siempre tiene que ver con quedarte inmutable con la persona que te hace pasar por vivencia buenas o malas. Puedes aceptarlo y alejarte, o tal vez quedarte y argumentar para lograr un cambio.
Hoy ocasiones que el perdón no va hacia los de afuera, a veces el perdón lo tienes que aplicar contigo.

No es estratégico ser extremadamente severo con uno mismo. Eso hace que agregues más piedras a tu camino en vez de quitarlas. Pero esa medida justa también viene con la conexión que tengas con tu interior.

Porque como te describí más arriba, eso trae aparejado muchas cosas que te hacen tener a tu ser en plena presencia en las situaciones que transitas. Como ves, la construcción viene de la introspección que logres con tu propio “;ser”;. Y al perdonar o perdonarte, logras una paz que hace que todo lo que viene luego se desarrolle con más fluidez.

El camino que te sugiero para lograr esa conexión contigo, o afianzarla, es mediante la meditación.
Cualquier meditación sirve. Me suelen preguntar cuál es la mejor, y siempre respondo lo mismo; la mejor es la que más te guste. No hay una mecánica de meditación mejor que otra, esa parte te toca a ti decidirla. Te invito a que pruebes algunas opciones y te quedes con la que más confort te traiga.

Perdona y perdónate y estarás en paz en muchos aspectos de tu vida. El sentirse bien es mucho más sencillo de lo que crees.
Recuerda #CuandoSeQuiereSePuede

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Mentalista, motivador, hipnotizador.

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