A ducharse más que le hace bien a tu mente

Siempre te cuento sobre el nuevo paradigma que se usa para observar a las personas: de forma científica se demuestra como mente y cuerpo se afectan entre si. Ya sea que una emoción termine afectando al cuerpo, o al revés, que el cuerpo termine afectando a  nuestra mente y a nuestras emociones. Son muchas las historias que se escuchan de personas destacadas, seguramente de alguien que conoces y alguna vez te pudo pasar a ti, donde las buenas ideas o soluciones aparecen en el momento de bañarse.

El neurólogo Marcus E. Raichle realizó un estudio al respecto y lo publicó en el 2010. El efecto que tiene el disfrutar con tiempo una ducha hace que hagamos conexión con nuestro cuerpo y eso ayuda a que logremos una conexión con nosotros mismos. Es por eso que muchas personas usan ese momento para, por ejemplo, meditar. Cuando sucede esto entra en juego la “red neuronal por defecto”. Este es un espacio donde se conjugan toda la información exterior con la que ya tenemos.

Es el mejor momento donde aparecen nuevas soluciones a problemas que parecían sin salida o tal vez surja una buena idea. Este estudio hace énfasis que la ducha produce este efecto si realmente se disfruta. Nada de esto sucede si es una ducha a las apuradas con la mente puesta en otra parte. La idea es hacerse un tiempo, sin importar cuanto, para disfrutar de ese momento. Otro estudio determinó que se genera más dopamina.

El organismo cuando aumenta su producción hace que desaparezca la tensión y el estrés. Una buena ducha también hace que aumentemos la producción de noradrenalina y esto produce que la melancolía baje o desaparezca y alivia los
cuadros depresivos, entre otras cosas. En consecuencia es que estaremos más predispuestos a los aspectos positivos de la situaciones.

Nos ponemos más creativos y ayudamos a lo que la psicología llama “incubación”. Esto es cuando tenemos una situación que resolver y la dejamos descansar por un momento. Esa situación entra al inconsciente y este juega como quiere asociándolo a diferentes ideas y otras situaciones similares o totalmente opuestas. Una vez que retomamos esa idea, “mágicamente”, nuestro inconsciente nos la devuelve con una solución.

Un buen momento para rescatar esa idea es cuando nos bañamos. Como ves, este tipo de datos te ayuda a conceptualizar una solución. Con esto me refiero a que al estar mal o con una preocupación a veces hace que ese sentimiento termine por ganarte, haciendo que veas únicamente puertas cerradas a cualquier solución. Teniendo un conocimiento de cómo funciona todo tu cuerpo (mente y cuerpo) puedes provocar a tu mente para que te haga sentir mejor e ingreses a una frecuencia más positiva.

Si estás en una de estas etapas, aún sin ganas, pruébalo y verás que este tipo acciones sencillas tienen su resultado. El sentirte bien es mucho más sencillo de lo que crees. Recuerda #CuandoSeQuiereSePuede

www.tusam.com

mm
Acerca de TUSAM 79 Articles
Mentalista, motivador, hipnotizador.

Sea el primero en comentar