Valorate

No puedes alcanzar con éxito tus metas si no te valoras. Suena trillado y es una típica frase que se puede encontrar en la web o en las redes sociales, pero también es una realidad.

No puedes avanzar si no usas como base tus fortalezas y si no conoces tus debilidades. Sobre valorar o no valorar son piedras en el camino que molestan, entorpecen y hasta a veces bloquean la meta a la que quieres llegar.

Es tan sencillo lo que hay que hacer, que a algunas personas les parece innecesario hacerlo porque al no ser complicado creen que no sirve y por ende innecesario. No siempre lo complicado de hacer o ejecutar es lo que te hace avanzar o te trae una solución.

Imagínate que vas hacer una comida. Estoy seguro que lo primero que vas hacer es fijarte que ingredientes te hacen falta para la elaboración. Para llegar a una meta es lo mismo, debes fijarte que necesitas. Puede ser que necesites constancia, concentración, o tal vez estar en calma (porque sabes que la ansiedad te gana).

Tu debes hacer tu propia lista de los puntos fuertes y débiles que tienes. Hay persona que me dicen cosas como: -“cuando me pongo con algo, tengo constancia pero la ansiedad de hacer me corre del camino”-.

Entonces, por ejemplo, con un simple ejercicio de respiración y relajación se baja la ansiedad así no molesta tu punto fuerte que puede ser la constancia. Hay otras personas me dicen que tienen constancia, que no tienen ansiedad pero la concentración se les va.

Si es así, debes saber que la concentración es pendular. Y la mayor concentración se da cuando ese péndulo pasa la mayor cantidad de veces por el punto deseado. Esto se entrena con aquellos ejercicios que ayudan a focalizar la concentración.

Por ejemplo, juegos donde debes buscar palabras que se encuentran dentro de un gran grupo de letras donde a primera vista parecería que no dicen nada. Estos son apenas unos ejemplos de como debes manejarte. Hay personas que dicen “no puedo” sin intentarlo, “no sirvo” sin siquiera haberse mirado así mismas, “seguro que no me va a salir” condenándose a una profecía auto cumplida.

En este último punto hay que tener cuidado.  Porque el inconsciente puede recibir ese mensaje, hacer de eso una programación mental negativa y así, sin darte cuenta, comienzas hacer pequeñas cosas, casi imperceptibles, que sumadas te terminan llevando al fracaso. En cambio si te apoyas en mensajes positivos, ayudas a tu mente a que se programe mejor.

Pero este punto también tiene sus detalles.  Si tu dices -“voy a ser mejor”- el inconsciente no va a entender. Porque lo que se va a preguntar es -“mejor en que?”- y así termina por no ser nada significativo para el inconsciente. En cambio si dices -“voy a tener más calma cuando suceda (lo que te molesta)”- ahí el inconsciente lo va a entender mejor. Si a esto le agregas una técnica de fijación de ideas vas a tener éxito seguro. Ser cada día mejor y sentirte bien es posible!! Recuerda #CuandoSeQuiereSePuede

Acerca de Oscar Posedente 12821 Articles
Periodista, locutor, actor y editor de Semanario Argentino y de Radio A de Miami. Director de Diario Sur Digital.