Desde antes del mediodía, decenas de integrantes de organizaciones sociales que lucharon muchos años por el tratamiento de una ley que contemple el uso medicinal del cannabis esperaron que los senadores trataran el proyecto que había pasado con éxito por la Cámara de Diputados en noviembre. Cerca de las ocho de la noche, cuando los Senadores aprobaron la propuesta por 58 votos a cero, los festejos empezaron fuera del recinto.
Una de las que celebró la aprobación fue la titular de la Cannabis Medicinal Argentina (CAMEDA), la médica Ana María García Nicora, quien destacó que «la ciencia viene a iluminar el uso ancestral«. «Ahora tenemos un marco legal para el uso, investigación y tratamiento en cannabis medicinal. Había un vacío social, académico, científico y político, y ahora hay que seguir construyendo conocimiento sobre de qué hablamos cuando hablamos de cannabis medicinal», agregó García Nicora.
La titular de CAMEDA además consideró que a partir de la aprobación de la ley, lo que sigue es «cambiar el paradigma. Llevamos conocimiento, educamos, y con la educación logramos una votación por unanimidad en Diputados y Senadores».
En la misma línea se manifestó Valeria Salech, de la organización Mamá Cultiva, quien aseguró que «siento que empezamos, es el momento de empezar a trabajar. Queríamos a la ciencia involucrada, se que hay muchos científicos y muchos médicos que estaban esperando esta ley para trabajar al lado nuestro sin que los señalen«.
«Queremos empezar a trabajar con un montón de científicos del Conicet que estaban esperando esta ley para empezar a trabajar con nosotros», detalló Salech, quien además consideró que la sociedad «entendió nuestra lucha, que lo hacemos desde el amor más grande que una persona puede tener, que es el amor por un hijo. No buscamos ninguna otra cosa que verlos mejor».
Por su parte, el senador Juan Manuel Abal Medina admitió que «como todo primer paso, no alcanza, pero marca una dirección. En declaraciones a la revista THC, el legislador peronista dijo que «la limitación es que no se legisla el autocultivo, pero con la aprobación se está enviando un mensaje claro a los responsables políticos, a la Justicia y a las fuerzas de seguridad: estamos en un nuevo escenario, el cannabis medicinal es un derecho de los argentinos».
GG
