Dos naufragios en el Mediterráneo dejan al menos 250 desaparecidos

Los migrantes siguen intentado llegar a Europa. El fin de semana cruzaron 6000. Pero dos embarcaciones se hundieron y muchos de sus pasajeros no fueron hallados.

El Mediterráneo se sigue tragando los sueños y las vidas de los migrantes y refugiados que intentan llegar a Europa. Más de 6.000 cruzaron entre el viernes y el domingo tras ser rescatados en alta mar por buques de ONGs y de la Frontex –la Agencia Europea de Fronteras-, pero según el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados –Acnur- al menos 250 habrían muerto tras hundirse dos pequeñas embarcaciones.

 

La madrugada del viernes al sábado se hundió una pequeña barcaza de madera, todavía cerca de la costa de Libia, dejando al menos 163 desaparecidos. La Guardia Costera libia pudo rescatar en el mar sólo a seis hombres y una mujer. El domingo se hundió un gomón y provocó otros 82 desaparecidos después de que se pudiera rescatar a 50 personas.

El mar ha devuelto a la costa libia muchos de los cuerpos. Un portavoz de la Media Luna Roja libia dijo a la agencia Reuters que “todos los cuerpos eran de mujeres” y que había “un cuerpo de una niña de menos de un año”. Este año son ya más de 1.300 las personas muertas o desaparecidas intentando alcanzar las costas europeas. 43.000 han conseguido hacer el viaje, un aumento del 38% con respecto al mismo período del año pasado.

A este ritmo y teniendo en cuenta que las travesías aumentan en verano porque el mar está en mejor estado, podrían ser más de 200.000 personas las que intentaran cruzar el Mediterráneo. En 2016 cruzaron más de 180.000 y perdieron la vida al menos 5.000. Las llegadas aumentan a pesar de que los gobiernos europeos intentan hacer todo lo posible para bloquearlos en Libia entregando patrulleras de vigilancia costera a las autoridades libias.

 

Cécile Pouilly, portavoz de Acnur, dijo que las operaciones de rescate en el mar “son de crucial importancia, incluyendo las de la Guardia Costera italiana, en coordinación con Frontex y con las Ong’s”.

Pero más allá de la urgencia de los rescates, Pouilly dijo que “también hay una urgente necesidad de atacar las causas que hacen que la gente se mueva y ofrecer alternativas creíbles a las peligrosas travesías que hace la gente que necesita protección internacional, incluyendo vías seguras y accesibles para alcanzar Europa como reunificación familiar y reubicación” de refugiados.

La Unión Europea mantiene dos discursos. Mientras publicita los rescates que hacen los buques de Frontex –ni la mitad del total-, esta misma organización de control de fronteras critica a las 10 ONGs que tienen buques en el Mediterráneo. Según Frontex, esos buques animan a los traficantes de personas a lanzar los gomones cargados de migrantes al mar a sabiendas de que serán rescatados.

La sede de la Fiscalía italiana en Sicilia abrió incluso una investigación para saber si las ONGs se coordinan con los traficantes de personas, aunque días después reconoció que no tiene ninguna prueba de ello. Los datos de la Guardia Costera italiana aseguran que en 2016 las ONGs rescataron a 46.795 personas, muchas más que las misiones ‘Tritón’ y ‘Eunavfor’ de la Unión Europea, a pesar de que estas dos misiones oficiales cuentan con más medios.

La diferencia se explica porque los buques de las ONGs se colocan en las zonas donde se producen más naufragios, cerca del límite de las aguas territoriales libias. Las misiones oficiales europeas tienen en cambio el mandato de “proteger” las costas italianas y maltesas, por lo que normalmente están muy lejos de esas zonas.

Acuden a los naufragios –lo contrario sería una violación del Derecho Marítimo Internacional- pero el peso de los rescates sigue a cargo de ONGs financiadas con aportes privados.

Después de la actuación de la Fiscalía de Sicilia y ante las críticas de las ONGs, tanto Frontex como la Comisión Europea y el gobierno italiano se desmarcaron de la actuación del fiscal. Pero el director de Frontex Fabrice Leggeri dijo en una entrevista a la revista alemana ‘Der Spiegel’ que la cercanía a la costa libia de los buques de las ONGs hace que los traficantes de personas lancen los gomones de migrantes sin siquiera darles el carburante necesario para la travesía sino para recorrer apenas las 12 millas náuticas necesarias para salir a aguas internacionales.

 

GG

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Periodista, locutor, actor y editor de Semanario Argentino y de Radio A de Miami. Director de Diario Sur Digital.