Fútbol real

Don Tucho es un hombre que ronda los ochenta y tantos, y lo ha visto todo. Cuando decimos todo, es en referencia a este lindo deporte llamado fútbol.

Es de esos que recitan sin titubear la delantera de River de los 50, o el equipo de Racing o Boca que brillaba en esa época o los cara sucias de los Cuervos o el Rojo de Avellaneda en su dorada época del rey de Copas.
Es de su equipo fanático, pero también lo es del fútbol en general.

Cuando se sienta a hablar y tiene público apela a los recuerdos. Es entonces cuando Don Tucho, se transforma. Y así como si estuviera transmitiendo en una radio en vivo, lo hace con el partido que vio hace muchos años.
Es notable mirar, como su cuerpo al momento de hablar de fútbol, se vuelve activo, y que los pequeños temblores y dolores de hueso que acusan su edad quedan en el olvido. Hasta su mirada cambia, se vuelven sus ojos de otra forma, tienen como hasta un tono de luz.

Cuando habla del fútbol, y repasa las décadas pasadas, reconoce que antes se jugaba mejor, y cita a Di Stéfano comparable a un Maradona o a un Messi.
Y la forma de no discutir con él es cuando dice….”sabes qué pasa nene, antes no había tanta Televisión, el futbol eras lo que veías en la cancha”.
Y si, ahí se hace difícil contradecirlo. No podemos ver a Di Stéfano salvo alguna imagen lejana y sin color rayada por el tiempo.

Fue entonces cuando se me ocurrió que a esta pequeña enciclopedia llena de fútbol llamada Don Tucho, invitarlo a ver la final de la Champions League.
Quería observar en Don Tucho esa luz en su mirada como cuando habla de décadas pasadas, quería saber si había algo que lo cautivaba, que lo deslumbrara.
Lo primero que lo cautivo fue el estadio, claro que lo comparaba con esos estadios de madera y tablón que él solía asistir, a este con techo, imaginemos… un abismo.
Pero posteriormente, observe más su deleite y su climax.

Del juego, los jugadores y hasta el atrevimiento a jugar y que hasta parecían divertirse.
Y de su boca entonces escuche algunas cosas hasta risueñas, dejando de lado los peinados y cortes de pelo y dijo: “che nene como juega ese que parece a Larry el de los tres chiflados” este Ronaldo es una maquina me hace acordar a Pontoni, mamita “o“ ese Isco de donde salió” y así siguió hasta que vino el primero del Real, en donde lo vi pararse y decirme “ che pero que golazo de este Ronaldo, que buena jugada…”.

Pero donde lo volvió a cambiar otra vez su mirada hasta casi las lagrimas fue en esa Chilena que será recordada por mucho tiempo y ahí me dijo “pero que golazo que hizo el ruso este por Dios”.
Luego vino el segundo tiempo y lo vi pararse más de una vez, no pudiendo creer y no cansándose de ver lo que pasaba por sus ojos.
El partido terminó y entre mates, ya íbamos por la tercera pava, vimos los festejos y la copa.
Siguió diciéndome acerca de los festejos, “mira qué orden hasta se sacan fotos cada uno con la copa, y encima para la vuelta olímpica no se ponen desnudos como acá”.
En eso, nada pude decirle porque nuestros festejos domésticos de campeonato dejan mucho que desear. Cuando nos despedimos me miró con esos ojos llenos de brillo y sin ningún temblor jugando con las palabras, me dijo, “gracias nene, hoy vi fútbol real”.

Nos reímos y finalmente con el abrazo final me recordó, “che nene, mañana acordarte que juega la celeste de los pibes, levantate ehhhh”.
Me volví a reír, tenía el corazón lleno de gozo, de plenitud, había visto “fútbol Real”, y encima con la grata compañía del gran Don Tucho.

Acerca de Oscar Posedente 12821 Articles
Periodista, locutor, actor y editor de Semanario Argentino y de Radio A de Miami. Director de Diario Sur Digital.