San Lorenzo de los milagros

Dice la historia que allá por el año 1908, en el Oratorio de San Antonio un Curita Salesiano, Lorenzo Massa, convocaba, con el pretexto de la pelota a un sinfín de chicos que se congregaban en la zona de Caballito y Almagro. La excusa era evitar los peligros que padecían esos chicos frecuentando las calles porteñas, y unirlos bajo una pelota de gajos.

Parece que los encuentros fueron más que frecuentes, el Padre sabía tentarlos con la sana compañía del balompié, hasta que un día ese grupo de emprendedores del deporte decidieron que tenían que ponerle nombre institucional a todo eso. Tantos picados y tanta camarería hizo entonces nacer un primer nombre , Los Forzosos de Almagro.

Pero luego después de alguna disidencia, a uno de ellos se le ocurrió el nombre del enorme Curita Salesiano, y otro agregó el “san” y otro el barrio, y así se termino definiendo su nombre final, San Lorenzo de Almagro.
Algunos equipos de Argentina, tienen en su esencia algo particular, así unos se caracterizan por la desmedida pasión de sus hinchas, otros se los conecta con la garra, y otros con el buen juego.
Quizás el Santo de Boedo tenga algo de todo esto a través de sus grandes equipos, recuérdese los carasucias como de buen juego, pero a la vez tiene algo intangible y místico que hace que supere escollos y dificultades extremas.

Nos remontaremos a tres circunstancias de no hace más de 5 años en donde el Padre Lorenzo allá en el paraíso logró un guiño de supremo, o tal vez el mismo Papa Francisco que debe tener influencia, a través de sus ruegos provocaron a lo largo de 3 años, que apuntaremos, milagros impensados.

1) En el año 2012 el Cuervo tuvo una situación complicada con el promedio. El equipo que tenía como técnico a Caruso estuvo a punto de descender en forma directa.
Recuerdo que algunos amigos y familiares muy directos estaban totalmente
resignados a descender. Sin embargo, no solo no lo hicieron en forma directa;
jugaron la promoción y en forma agónica se salvaron. Situación superada primer Milagro.

2) Al año siguiente de aquella promoción resurgieron y salieron campeones siempre sorprendiendo, no por su gran juego, pero si por su mística, en un campeonato parejo y que logró por su garra sacar ventaja. Segundo milagro.

3) En el trascendente año 2014, logra algo que hasta allí le faltaba, la ansiada Copa Libertadores. Que vaya la paradoja no le fue fácil. En particular y como algo anecdótico, recordemos cómo fue su clasificación en la fase de grupos. Clasificó a través de un gol propio y otro ajeno, en los últimos 5 minutos, de los 90 finales. Recordemos a los jugadores escuchando la radio, luego de terminado su propio encuentro gritando aquel gol de Independiente del Valle. Vale decir que terminó clasificando como penúltimo en la general, luego siguió avanzando hasta llegar, siempre con sufrimiento, al ansiado campeonato. Milagro extremo podríamos decir.

En la actualidad parece que esto no se detiene, en la semana, y jugando no muy bien, se enfrentó a Emelec de Ecuador, por la Copa Libertadores, luego de obtener un resultado adverso, terminaron yendo a penales y con mucho sufrimiento consiguieron pasar a cuartos de final.
Al observar el partido la semana que pasó, uno tenía la sensación que la mística milagrosa no le iba a fallar. Y como es de suponer, se ve que allá en el cielo el tal Padre Lorenzo, como lo hizo en su momento, movió sus influencias y nuevamente pasó de fase, a través de los penales.

En tan solo 2 años, San Lorenzo pasó de casi descender hasta su máximo logro, la Copa Libertadores de América.
Esto es algo fuera de lo común, impensado, místico, por eso, en realidad en vez “de Almagro” debería pasar a denominarse distinto y agregar “de los Milagros”.
De esta forma debería llamarse finalmente, San Lorenzo de los Milagros.

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Acerca de Gerardo Lemmi 62 Articles
Gerardo Lemmi es escritor y periodista deportivo.

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