La poca lluvia registrada este sábado en la Ciudad de Buenos Aires y alrededores sirvió para bajar la temperatura a unos cómodos 26 grados.
Aunque el pronóstico del tiempo para el resto del día contempla la probabilidad de lluvias y tormentas, el sol salió al menos por un rato y la marca máxima de 35 grados ya quedó atrás.
El Servicio Meteorológico Nacional prevé para la tarde del sábado 16 de diciembre nubosidad variable, probabilidad de lluvias y tormentas, algunas fuertes, y ráfagas de viento del sector sur.
Lo que empezó como un sábado de calor insoportable mutó de a poco en una jornada de clima inestable pero con una temperatura tolerable que hasta dio un respiro para los amantes de la pileta.
Sin embargo sigue vigente el alerta por tormentas y granizo durante el sábado a la noche para la Ciudad y el Gran Buenos Aires.
