El gobernador de California, Gavin Newsom, ordenará el cierre de todas las playas y parques estatales a partir del viernes, luego de que la gente llenó la costa durante un sofocante fin de semana a pesar de su orden de distanciamiento social para frenar la propagación del COVID-19, según un informe enviado a jefes de policía de toda la región.
Aunque la mayoría de los parques estatales y muchas playas, sendas y parques municipales llevan semanas cerrados, la orden de Newsom recibirá seguramente el rechazo de las localidades que alegan que pueden proporcionar, con seguridad, algo de alivio a los habitantes ávidos de aire fresco.
Crece la presión para aliviar las restricciones estatales y locales que han asfixiado a la economía, cerrando muchas empresas y sumando casi 4 millones de personas a las listas de desempleados.
El miércoles, seis condados de la zona de la Bahía de San Francisco que fueron los primeros de California en imponer la cuarentena la mitigaron levemente para permitir actividades de jardinería, construcción, mercados de pulgas y viveros con la condición de mantener el distanciamiento social.
Y en una decisión que sería crucial para muchos padres, la orden aclara que se permiten los campamentos de verano, pero a condición de que los niños permanezcan en grupos pequeños y los padres sean trabajadores de la salud o de otros sectores considerados esenciales por la orden estatal.
Se mitigaron algunas disposiciones relativas a la recreación, pero no de manera uniforme. Por ejemplo, a partir del viernes se permite jugar tenis en Sacramento, pero no en San Francisco.
Para mayor confusión, algunas disposiciones no podrán entrar en vigencia porque se contradicen con la cuarentena estatal.
El condado de Riverside dispuso abrir parques para el senderismo, el ciclismo y los paseos a caballo, aunque con la obligación de usar mascarillas.
Sin embargo, las autoridades de salud han advertido que las aglomeraciones facilitan el contagio y que el gobierno debe ser cuidadoso a la hora de mitigar las restricciones para evitar una nueva ola de infecciones.
