A pedido de Alberto Fernández, China renovó el swap por u$s8.500 millones que venció el 17 de Julio y estaba vigente desde Diciembre 2015. El nuevo acuerdo permitirá que el Banco Central mantenga su nivel de reservas brutas para que sean utilizadas en caso de necesidad.
El swap técnicamente no es un préstamo, sino un intercambio de monedas que pasan a integrar las reservas sin generar ningún costo. Sin embargo, ante una crisis cambiaria, el Banco Central puede transformarlo en dólares para intervenir, aunque esta operación no es inmediata.
La renovación de este instrumento fue uno de los primeros contactos que mantuvo el presidente Fernández con China y podría especularse hasta con una ampliación de ese swap que demostraría un gesto de apoyo más de China hacia Argentina. En este sentido, económicamente, le permite al país contar con mayor respaldo para afrontar una eventual corrida bancaria. El swap con China representa cerca de la mitad de las reservas del Banco Central.
Por otra parte, ¿qué puede pedir China a cambio?, siempre hay algún tema en torno a China, por caso, la trama tecnológica con sus capítulos dedicados a la imposición de nuevos estándares, rumores de espionaje, la guerra con Estados Unidos y el tan polémico y trascendental modelo 5G ya que podrá controlar buena parte de los datos que circulan en el planeta.
Al respecto, el tema es clave en cualquier sociedad moderna ya que no solo se está hablando de personas con celulares sino de la posibilidad de conectar todos los objetos. Por cierto, el planteo de EE.UU es no ceder infraestructura estratégica y sensible a quien pueda usarla en su contra.
En tanto, China tiene un interés especial en que Huawei sea la empresa proveedora de 5G en América Latina y que lleve adelante el despliegue de la próxima generación de telecomunicaciones en Argentina, pero la Casa Blanca quiere impedirlo. Este acercamiento ha sido interpretado por muchos como una suerte de toma y daca por el cual Argentina se compromete a ser receptiva con la propuesta de Huawei
Asimismo, la potencia oriental tiene un interés estratégico en ser proveedor principal de esta tecnología en Latinoamérica y existe una fuerte disputa que ya se está dando con el resto de los proveedores en Europa, Sudeste Asiático, y llegará más tarde a África y la región. Pero más allá de las telecomunicaciones existen dos razones fundamentales por las que Beijing muestra un interés estratégico hacia Argentina.
Por un lado, es que ve una gran proveedora de materias primas que el país asiático necesita, como soja y derivados y por otro lado que es un país importante desde el punto de vista de la provisión de energía y socio fundamental en materia aeroespacial.
Los analistas entienden que el 5G no solo será una fuente para recopilar información de inteligencia, sino también uno de los campos en los que desatará la ciberguerra, o sea, ataques ejecutados a distancia contra la infraestructura crítica de naciones y compañías. Así, si un país tiene acceso al control de esa infraestructura puede dejar una ciudad sin luz, sin comunicaciones o sin agua. De hecho ya se puede pensar que se está en una ciberguerra, la diferencia es que es declarada con soldados ni tanques ni aviones sino que los ataques se disparan desde agencias de inteligencia privadas para que no se sepa de donde provienen.
Cuando a EEUU, no le gusta algo, lo manifiesta abiertamente. Le pasó a Macri y también le puede pasar a Fernández, más todavía porque es un gobierno que se muestra afín a China. En este sentido la posición de Argentina es complicada ya que no puede prescindir de ninguna de las dos relaciones y en este momento de negociación de la deuda, EEUU es un actor clave por lo cual será difícil para Argentina mantenerse neutral dentro de esta nueva forma de bilateralismo, chinos y yanquis, como antes era chinos y rusos.
Hoy Argentina está en una posición donde tanto China como EEUU tienen mucho peso por distintos motivos y en definitiva mantiene un débil equilibrio entre las dos economías más poderosas. La elección, o no, del 5G chino podría hacer que se rompa. (iProfesional)
