La discusión se había acalorado. Ya ni el vozarrón de Cacho tantas veces conciliador podía tapar semejante batahola. Es que cada uno tenía su razón, mezclando algo de pasión con una supuesta objetividad.
No había acuerdos no había consensos. El bar era un campo lleno de minas, que explotaban según las razones que volcaba cada uno.
El tema era de por sí polémico: los promedios del descenso.
Sistema único en el mundo, no hay campeonato o liga que lo tenga. Es sabido que en toda Liga del mundo se van los dos y hasta a veces cuatro de los que terminen últimos.
En Argentina sabemos que no es así. Se van a la segunda categoría los que tienen el peor promedio como resultado de tres campeonatos.
El tema de la discusión se refloto porque el nuevo presidente de la AFA, Tapia, dijo en la semana que si fuera por él, eliminaría el famoso promedio del descenso, que deberían irse los que resulten últimos.
Y entonces en este cafetín, unos opinaban que no tenía sentido haberlos creado y otros recriminaban según su color de fanatismo que se había institucionalizado para favorecer a los equipos grandes del fútbol Argentino, y más precisamente a Boca y a River.
Esto último, hizo salir de sus casillas al Gordo Tucho, que lo que tiene de ancha contextura física también lo tiene de hincha de Boca. Él decía que nunca lo favorecieron que eso no era verdad y que hablaban por rencor y celos. Lo decía claro porque en la mesa estaba
Lucho, el Flaco Tino, Tincho y Luca.
El más pasional era Tincho que es de River debatiendo con el Gordo Tucho y elevando su voz y diciendo que eso lo habían puesto para favorecer a Boca. Pero como no era muy preciso entonces Tucho no tomaba muy en serio y le decía que era un rencoroso.
Los demás aportaban en esa confusión más datos imprecisos y la discusión no tenía fin.
Hasta que detrás de su mesa, un flacucho, con anteojos, despeinado que se llama Ciro, pibe más joven de esos que se dedican a crear programas en sistemas levanto la mano por detrás.
Ciro es de esos que cuando miran a la cara parecen que sus ojos traspasarán más allá de la retina del otro.
Y Cacho dijo, “que querés pibe, esto no es el colegio que se levanta la mano para hablar”
Y entonces Ciro, como si fuera una base de datos dijo sin interrupción.
Los promedios por primera vez se crearon en el año 49, luego volvieron en el año 57 hasta el 63. Luego de 20 años en el 83 regresaron, dos años antes había descendido San Lorenzo, y ante el peligro que otro grande descienda, se volvió a instituir, promediando de
cada equipo los últimos dos campeonatos.
Todos creían que esto favoreció a River, pero sin embargo Boca de muy malos campeonatos también lo fue, porque a mitad de Torneo se modificó en Tres campeonatos el promedio en lugar de dos lo cual hizo beneficiar a los
xeneizes. Sin embargo, a pesar de todo eso el que descendió por promedios ese año fue otro grande, Racing, si hubiese sido por salir último hubiera sido River. Según la estadística de 34 torneos con promedio en solo 10, coincide el último con el peor promedio.
Esto hace que no se vaya el de peor campaña en un torneo sino por lo contrario que se busque ser más justo con el historial de tres torneos por equipo.
Y siguió Ciro y siguió hasta que Cacho dijo “está bien ET para acá, es demasiado ya…”. Luego de esto cual si fuera un robot Ciro caminó y se sentó a su mesa siguiendo con su trabajo.
Finalmente logró algo después de todo eso, volvió la cordialidad en la mesa, volvió el consenso y buenas formas.
Es que como dice el dicho bíblico “el que esté libre de pecado que tire la primera piedra “.
