A partir del jueves 7 de septiembre, las personas que alquilen una vivienda en la Ciudad ya no tendrán que pagarle comisión a la inmobiliaria, porque empieza a regir la ley que regula la actividad aprobada por la Legislatura porteña en agosto. Los honorarios correrán por cuenta sólo de los propietarios, aunque su valor no podrá superar el 4,15% del total del contrato.
Además, está prohibido que las inmobiliarias cobren gastos de gestoría de informes. Y éstas deben exhibir en sus locales y páginas web los derechos de los inquilinos. El objetivo de la norma es disminuir el costo de entrada para acceder al alquiler de una vivienda.
«A partir de mañana solo habrá que abonar para ingresar a una vivienda: depósito en garantía, mes de adelanto, $360 por pedidos de informes y $450 por la certificación de nuestra firma. Por todo esto las inmobiliarias deberán entregar factura sí o sí», aclaró Inquilinos Agrupados en un comunicado.
La ONG reclamó que el Gobierno de la Ciudad, la AFIP y el IVC realicen controles y advirtió: «Sabemos que las inmobiliarias se van a resistir a cumplir la ley, por eso estaremos en permanente comunicación con los inquilinos, a quienes les pedimos que ante cualquier incumplimiento nos escriban a inquilinosasesoria@gmail.com con el nombre de la inmobiliaria, teléfono, condiciones que exigen por fuera de la ley y cualquier otra irregularidad».
El Colegio Único de Corredores Inmobiliarios de la Ciudad(CUCICBA) rechaza la ley y alega que viola el Código Civil y Comercial y la Constitución, porque vulnera su derecho a cobrar «justa retribución» por su trabajo. Desde el sector anticiparon que recurrirán a la Justicia. Aparte, aseguran que la norma logrará el efecto contrario al buscado, porque la comisión que pagarán los propietarios aumentará del 2% o 3% al 4,15% y éstos terminarán trasladando su costo al precio del alquiler.
GG
