El viernes 17 de noviembre a las 9:10 el vocero de la Armada Enrique Balbi dio la primera conferencia de prensa sobre la desaparición del submarino ARA San Juan, del que no se sabía nada desde hacía 2 días, con 44 tripulantes.
No quiso hablar de una nave perdida.
«Para eso primero hay que buscarlo y no encontrarlo», dijo, aferrándose al protocolo.
Pero Balbi no usó tecnicismos militares cuando dijo no saber «de dónde había salido el rumor» sobre un incendio en el submarino, que según se reveló ayer había sido reportado por el propio capitán del navío.
El incendio, para la Armada, «apareció» 12 días más tarde.
Tras bajar las escaleras del edificio Libertad, sede de la Marina, el portavoz miró a las cámaras de los móviles y cuando le preguntaron sobre el incendio, dijo, textualmente:
«Oficialmente no tenemos ninguna novedad sobre eso. No sé de dónde habrá salido ese rumor. El tema es que cuando hay un problema de comunicaciones, uno puede pensar que es un problema de alimentación. El submarino es una máquina eléctrica, llena de baterías, que hay que recargarlas cada tanto. Entonces uno puede asociar que pudo haber un problema en las baterías o porque no tenga un tema de alimentación, de equipos o de antenas».
El último mensaje que envió el submarino ARA San Juan, del 15 de noviembre, decía:
«Ingreso de agua de mar por sistema de ventilación al tanque de baterías N°3 ocasionó cortocircuito y principio de incendio en el balcón de barras de baterías. Baterías de proa fuera de servicio. Al momento en inmersión propulsando con circuito dividido. Sin novedades de personal mantendré informado».
Pese a que ese comunicado ya estaba en poder de la Armada, Balbi dijo con firmeza aquel viernes, en su primera aparición: «Es un tema de comunicación».
«Puede ser que pueda estar navegando y que el problema eléctrico sea con las comunicaciones. Eso es lo que no sabemos, por eso no hay que aventurar. Puede haber un montón de fallas o averías. No quiero dramatizar con este tema»
Recién ayer la Armada dio detalles del principio de incendio que había negado y declarado como «no oficial».
El incidente, confirmó Balbi, afectó el sistema de baterías de la proa.
Consultado el lunes por un periodista de un diario estadounidense sobre esa falla, el vocero de la Armada volvió dio más precisiones: fue “un principio de incendio” y que así se lo considera “cuando es humo sin llama”.
El vocero explicó que el problema se originó “por el ingreso de agua por el esnórquel a través del sistema de ventilación”, en el momento en el que el submarino estaba renovando el aire.
En la última conferencia de prensa, este mediodía, el vocero dijo estar sorprendido por «las versiones periodísticas en el día de ayer, porque hace más de una semana que yo les venía contando los diferentes indicios que fuimos recibiendo el submarino, en cuanto a entrada de agua por el snorkel, que ante el mal sistema de ventilación se produjo un cortocircuito con un principio de incendio, humo sin llama. También venía explicando al redundancia de equipos».
Pero admitió que guardó información clave sobre le avería: «Lo que sí es cierto, y voy a ser franco: nosotros no podemos mostrar un documento como se filtró ayer en los medios. Ahí está faltando el encabezamiento. Si nosotros mostráramos un desapacho de estas características, con una clasificación de seguridad importante, estaríamos vulnerando una ley que hace a la confidencialidad. De todas maneras, el mensaje confirma todo lo que les fui comentando sobre el principio de cortocircuito que tuvo, y cómo se informó».
Las averías del ARA San Juan habían sido detalladas desde el día 1. Y el comandante de la nave finalizaba su mensaje: «Mantendré informado».
Y luego, desde el submarino sólo hubo silencio. Y de la Armada, palabras de más o de menos.
GG
