Políticos, empresarios, negadores o gente de a pie? Quién es el culpable?

Hace 16 años vine a vivir a Estados Unidos, y un argentino que vivía aca, me dijo “que bueno que te viniste, Argentina no cambia más, los políticos son todos iguales”. A lo cual, fijé mi posición que un país no nace de un Big Bang, no importa gente para ocupar cargos públicos o empresas privadas.

Un país se hace desde tu casa, tu familia, tu educación, luego eso lo transmitis a tu cuadra, luego al barrio, a la ciudad, a la provincia y así a todo el país.
Vale decir, que si tu formación familiar (para la que no hace falta ser millonario) inculcó una conducta de honestidad, trabajo y apego a la ley, y vos te sentís orgulloso de transmitirlo a otras personas, la consecuencia es que para la mayoría de los ciudadanos, el país será eso. No importa desde que lugar de la sociedad, seas político, empresario, lavacopas o artista, la conducta va a ser el común denominador.

La culpa no es solo de los políticos!!! Le dije.

A veces odio no equivocarme. Porque si fuera como él decía, identificado el mal, se extirpa y listo. Pero no.
Hace una semana “el caso de los cuadernos”, en el cual un ex chofer de un alto funcionario de energía argentino, contaba como un libro diario, toda una trama de coimas y hechos de corrupción de una obscenidad superlativa.
Producto de este “Lava Jato” argentino, la justicia detuvo a empresarios privados y algún funcionario por cohecho y posible asociación ilícita entre otros cargos.

Tres de estos empresarios cómplices mas el propio chofer de apellido Centeno, pidieron, para decirlo rápidamente, ser buchones protegidos que negociarán su condena.
Estos empresarios cómplices, (lo mío es un prejuicio, ya que falta sentencia judicial) pagaban coimas para que el gobierno les adjudique obras multimillonarias, hoy, en lugar de aceptar dignamente que hacen lo que en muchos países del mundo es una práctica habitual, e ir a la cárcel (como varios políticos integrantes de esta banda), se asustaron y empezaron a hablar.

Lo grave de esto es que según ellos, el gobierno K los obligaba a pagar las coimas para que puedan obtener las obras o que les liberaran emprendimientos. O sea, nunca denunciaron por extorsión ya que les otorgaron varias obras que dejaban en sus bolsillos ganancias millonarias, y que en algunos casos ni llegaron a finalizarse.
A estos empresarios les importó nada ser parte del gobierno altamente corrupto.

Miraron su propio negocio y no les importó la gente. Volviendo al principio, ya tenemos dos de los culpables del retraso argentino. Pero Centeno era un simple chofer!! Piensa usted. Y su exesposa una simple trabajadora doméstica. Sin embargo el primero se queja porque su jefe solo le daba “migajas” de los bolsos llenos de dinero sucio que veía pasar y anotaba en su libro diario, y ella aceptó una casa de las Madres de Plaza de Mayo, falsificó documentos ante un escribano, dejó de trabajar, y en un reportaje que le realizó Jorge Lanata, puso en evidencia la habilidad para negociar con el círculo corrupto que rodeaba a su ex.

Entonces… ya tenemos tres responsables. Políticos, empresarios y “gente de a pie”, es decir, vos, yo, el vecino, la tía, digamos que, cualquiera al que le ofrezcan ganarse un mango fácil, aunque el país se funda. Sin contar obviamente, sindicalistas, profesionales, directivos deportivos etc. Es la “viveza criolla” llevada a niveles miserables.
Pero dejé para el final los principales responsables hoy por hoy, del estancamiento de un país que impide terminar de cerrar ese círculo vicioso, que este gobierno evidentemente se esmera por corregir.
Son “los negadores”.

Nacieron, con el peronismo, se alivianaron con la vuelta de la democracia y con el Kirchnerismo regresaron en su expresión más radical. Lanata la llamó la grieta. Y en ese terreno, “los negadores” encontraron el caldo de cultivo para permanecer aún hoy luchando en pos de derrotar a un gobierno antes de finalizar su período.

Descalifican: todo lo que hace la justicia es “persecución política”. Para ellos, ni Devido, Jaime, López ni aun los arrepentidos, tiene la culpa de nada. No son capaces de reconocer un error. A diferencia del resto que ve lo bueno y lo malo de una gestión, para “los negadores” en esos 12 años nadie fue corrupto, las tarifas debían estar regaladas y los policías deben ser asesinados y los delincuentes premiados. “Los negadores” son cómplices, porque mientras el resto lucha con fe poder salir adelante, ellos no quieren que al país le vaya bien.

Porque el negocio para ellos era el otro, el del subsidio, de la vagancia, del choripán y el acto. Fueron parte del negocio K y como cada ser humano tiene su costo, la minoría de estos negadores, hacía buenos negocios, y otros se chapuceaban en una mediocridad obsecuente, un Led de 40 y un Smartphone. Políticos, empresarios, gente de a pie, y negadores, parece un callejón sin salida. Será?

Acerca de Oscar Posedente 12821 Articles
Periodista, locutor, actor y editor de Semanario Argentino y de Radio A de Miami. Director de Diario Sur Digital.