Una gota más de corrupción en el mar político argentino. Por Pablo Dócimo

Todo gobierno debe actuar en tres frentes: el político, el social y el económico. Por supuesto muchas veces estos tres frentes están relacionados uno con otro; si hablamos de generar fuentes de trabajo o disminuir la pobreza, sabemos que son cuestiones políticas sobre temas económicos que repercuten en lo social, por citar dos casos. Ya desde antes de asumir, el gobierno de los Fernández ponía como eje de discusión la situación económica en general y el pago de la deuda en particular para solucionar todos los problemas que nos aquejan, ya que si bien lo económico es lo principal, no es todo.


Alberto -o vaya a saber quien, porque alguien (Cristina) le indica a diario que es lo que debe decir o hacer o a lo sumo lo aprueba a desaprueba- está convencido de que primero hay que solucionar el tema de la deuda y, en función a eso, resolver todo lo demás.

UNA GOTA MÁS DE CORRUPCIÓN EN ESTE MAR POLÍTICO
Alberto Fernández, en sus años de anti k, trató a Cristina de (entre otras cosas) psicópata, mentirosa y, sin decirlo abiertamente, como la peor presidente de la democracia.
Pero no fue el único. Sergio Massa trató a La Cámpora y al kirchnerismo de corruptos. Incluso los acusó de haber cometido un acto mafioso en su casa.
Axel Kiciloff trató a Massa de “forro”, y lo más lamentable, Felipe Sola, hoy premiado con el cargo de Canciller, en la campaña de 2015 trató a Anibal Fernández de narco, y curiosamente Aníbal se integra al gobierno para dirigir como interventor Yacimiento Carbonífero de Río Turbio, una empresa de energía signada por la corrupción.


Cuando uno ve a personas como la esposa de Sergio Massa, Malena Galmarini, designada como Directora de AySA, o a alguien como Sabina Frederic como Ministra de Seguridad parecería que pretenden tomarnos el pelo o hacer las cosas mal a propósito.
¿Pero por qué decimos que esto es una gota más de corrupción dentro de este mar político? Por dos razones: La primera es porque el primer acto de corrupción de un ciudadano es el de aceptar un cargo público cuando no está preparado para ello.


Ni Kiciloff, ni Malena Massa, ni Frederic, ni Felipe Solá, ni Aníbal Fernández están capacitados para ocupar los cargos que les fueron asignados. Pero no son los únicos, la lista es casi infinita.
La segunda, es que el Gobierno de Alberto Fernández​ vetó el decreto que impedía nombrar familiares, que fue determinado por Mauricio Macri en enero de 2018.

NO HAY PLAN ECONÓMICO
Volviendo a lo que el gobierno considera “los más importante” o el principal problema a resolver para poder solucionar todo lo demás, nos encontramos con un pequeño gran dilema: No hay plan económico.
De hecho, Cristina (si, Cristina) no ganó las elecciones precisamente por proponer un plan concreto, sino por generar expectativas diciendo que podían resolver los problemas económicos de la gente. Una vez más, todo fue relato.
Cuando después de las PASO se decía que el resultado era irreversible, tuvieron 5 meses para armar un equipo económico y diseñar un Plan.
Sin embargo, designaron a un tal Martín Guzmán, un ignoto economista proveniente de New York, una semana antes de asumir el cargo.
Entonces, queda más que claro que todo lo dicho durante la campaña fue, como siempre, relato y mentira.


Nunca supieron hacia donde ir, cosa que hoy queda al descubierto cuando vemos que a casi 6 meses de las elecciones primarias de agosto no hayan presentado ni si quiera una propuesta medianamente viable de lo que quieren hacer.

MÁS DE LO MISMO
Los países crecen cuando sus gastos son menores a sus ingresos. No existe otra manera ni es muy difícil de entender. Macri pagó con su derrota intentar ordenar la economía. Bajó el déficit fiscal primario de casi 7% del PBI en 2015 al 0,4 en 2019.
Adecuar tarifas, ordenar el Estado, hacer obras.


Sin embargo, el nuevo gobierno aumentó considerablemente la cantidad de funcionarios, creando además más ministerios, siendo este desde el retorno de la democracia, el gobierno que más ministerios crea o recrea -9 (nueve)- en relación a los heredados de una gestión anterior, además de secretarías y subsecretarías.


No solo esta administración no va a bajar el gasto público, sino todo lo contrario; al más puro estilo populista ya lo está aumentando.
Tienen un solo plan, un solo objetivo, evitar ir a la cárcel, todo lo demás es puro relato.

Acerca de Oscar Posedente 12821 Articles
Periodista, locutor, actor y editor de Semanario Argentino y de Radio A de Miami. Director de Diario Sur Digital.