Ante el COVID-19 los artistas buscaron nuevas alternativas para complacer a su público a la distancia. Los shows y contenidos de entretenimiento por streaming cada vez son más y ante la incertidumbre que genera la situación, compartirlos con sus seguidores es una opción muy rentable. El streaming se plantea como una de las pocas posibilidades a través de las cuales se puede monetizar la actividad.
En medio de la crisis por la pandemia, los productores se replantean el negocio y ya están pensando en hacer los grandes shows que se agendan año a año de este modo. Este nuevo medio permite a los artistas generar ingresos. Desde el comienzo de la cuarentena ellos han reeditado canciones y hecho shows desde su casa pero ya es momento de orientarlo a la parte lucrativa.
Ante el panorama social que se vive a nivel mundial desde artistas desconocidos que cobran entrada por ver el show desde la intimidad de sus hogares, cómodamente en el sillón de su casa, pasando por artistas de renombre y festivales de miles de personas se han dado cuenta de la oportunidad que les brinda esta nueva forma de manejarlo. Ya sea para brindar un show o estrenar material de manera on line, los artistas se van sacando el miedo y están viendo que es algo que funciona muy bien. El público consume contenido artístico que a su vez genera ingresos. Hablamos de artistas y shows alrededor del mundo generando contenido mediante este formato
El negocio en forma digital ofrece lo mismo que ofrecía el analógico por así llamarlo. También se viene una suerte de Meet & Greet en la que se puede chatear con el artista o concurrir a la prueba de sonido en el lugar donde se encuentre antes del show o mismo las entrevistas que se realizan de este modo.
El negocio se reinventó y las presentaciones por streaming han resultado ser una salida ventajosa para los artistas de seguir transmitiendo sus talentos como para sus seguidores de poder disfrutarlos desde la comodidad de su hogar. De este modo las salidas se amoldan al gusto de los espectadores. Pensemos que como tales podemos preparar algo rico y servirlo mientras vemos el show. Podemos usar un baño limpio y no esos portátiles que tan mal huelen luego de unas horas. No tener que preocuparse por el estacionamiento y poder estar en un festival o show del artista favorito dese cualquier parte del mundo también son otras de las ventajas.
Incluso para los adolescentes, como para los padres los libera de la preocupación de andar por ahí a altas horas de la noche y a medida que la cuarentena se vaya levantando poder juntarse más gente a ver los shows de este modo.
Se viene una vuelta de tuerca para el mercado musical que tan azotado fue los últimos años por las descargas streaming (irónico, no?) cuando tuvieron que adaptarse y bajar la cabeza. Pues, ahora es tiempo de aprovechar, reinventarse y tomar este nuevo modo de hacer las cosas donde todo el mercado se replantea de manera digital.
