“Chicha” tenía 8 años. “El Volcadero” es un enorme basural a cielo abierto situado en la zona oeste de Paraná, ubicado apenas a 10 minutos del centro de la capital de Entre Ríos. Allí murió Víctor Sebastián Barreto, de solo 8 años. “Chicha”, como era conocido entre los vecinos del barrio, fue aplastado por un camión municipal de basura el Domingo por la tarde, bajo la tormenta, mientras buscaba algo para comer.
Hace 10 años, un informe de TN exhibió la difícil realidad cotidiana de los vecinos del barrio San Martín y otros asentamientos emplazados en la zona. “Chicha” no había nacido y “El Volcadero”, como lo sugiere su nombre, ya tenía décadas de existencia recibiendo los desechos de una ciudad entera.
Muchas familias se acercan cada día para remover la basura y elaborar una tarea de clasificación informal entre plásticos, vidrios y cartones que después venden a los acopiadores. El nene, según cuentan testigos, había llegado hasta allí para poder alimentarse.
“Yo lo conocía y era muy dado con los demás. Jugaba con todos los chicos del barrio. Lo conocíamos todos acá, pero él no solía ir a ‘El Volca’, como andan diciendo por ahí”, cuenta una vecina del barrio que pide reserva de su nombre.
Según pudo reconstruir TN, el niño había llegado al basural colgado de una escalera ubicada en la parte trasera de un camión municipal. Fue en esas circunstancias donde perdió la vida. Se cree que un pozo en el suelo hizo tambalear al vehículo, que “Chicha”cayó al suelo y luego fue aplastado por la rueda trasera del camión.
La víctima tenía 7 hermanos y algunos de ellos se encuentran bajo la guarda del Consejo Provincial del Niño, el Adolescente y la Familia (Copnaf). El padre murió años atrás y varios vecinos coinciden en que la madre tenía dificultades para hacerse cargo de los chicos.
“Cuando muere el papá de ‘Chicha’, una tía queda a cargo suyo. Después volvió con la madre y el nene vivía de acá para allá jugando hasta tarde. Nunca le daba atención”, agregó la vecina sobre la mamá.
De acuerdo con los testimonios recogidos, el conductor del camión de basura siguió su marcha tras atropellar al menor y no se dio cuenta de lo ocurrido. Horas más tarde se presentó ante el fiscal de turno de Delitos Complejos, Leandro Dato, quien puso en marcha la investigación tras las intervenciones iniciales a cargo de la Comisaría 5°.
El funcionario le tomó declaración y, por el momento, no imputó al hombre. Fuentes judiciales indicaron que se aguarda el resultado de las pericias toxicológicas para conocer si -previo al hecho- el chofer había consumido alcohol o drogas.
“Como es calle de tierra, el camión pasó por un pozo y se sacudió todo por la estructura. En ese momento, el nene perdió la estabilidad, cayó al suelo prácticamente por donde estaban pasando las ruedas del camión y lo atropelló”, confió a TN Leandro Bello, periodista local.
También detalló que todos los días un grupo de nenes esperan con ansias la llegada de un particular camión que transporta residuos de un local de comidas rápidas. “Suelen esperarlo porque ya saben que viene desde ahí con comida, papas fritas y todo lo que el negocio tira”, dijo.
La tragedia remontó a otra sucedida hace tres meses también en un basural de Entre Ríos, cuando un hombre de 28 años murió aplastado por un camión recolector de residuos mientras hurgaba entre los desperdicios de Campo de Abasto, en Concordia, uno de los basurales a cielo abierto más grandes de la Argentina.
Entonces, y según testigos, el joven comenzó a retirar desechos que iban cayendo de un camión sin percatarse del movimiento de la gigantesca pala hidráulica que terminó matándolo.
Entre Ríos es una de las provincias más pobres del país, de acuerdo con los datos publicados por el INDEC para el primer semestre de 2022. El índice de pobreza en ese período alcanzó al 49,2% de los habitantes de Concordia, una cifra solo superada por el Gran Resistencia (Chaco), con el 49,9%.(TN)
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