Todo comenzó como un hostigamiento. Primero fue un llamado que Ángel De Brito desatendió de inmediato en la tarde del viernes, sospechando que quizás se trataba de un admirador que había dado con su número de teléfono y le pedía un saludo. Pero luego hubo otra comunicación. Y una más. A la par de la insistencia, el mensaje recibido iba creciendo en su tenor: derivó en amenazas y extorsiones. En caso de negar a corresponder con el saludo requerido, “te vamos a hacer lo mismo que le hicimos a Pampita”, era la intimidación.
El periodista bloqueó el número, creyendo que así todo quedaría resuelto. Lo llamaron entonces desde otro celular, repitiendo la modalidad. “Tenes dos minutos para cumplir”, le avisaban. “Ahora tenés un minuto. Se te agota el tiempo…”. Comprendiendo ahí mismo que la situación no era menor, el conductor de LAM se comunicó con el abogado Martín Leguizamón, para realizar la denuncia en la fiscalía del doctor Horacio Azolín.
De esta manera, Ángel de Brito reveló que fue víctima de amenazas y extorsiones, por lo que ya realizó la denuncia correspondiente y está todo en manos de la Justicia.
«Muchas gracias @Martin_Legui @grsain Director Nacional de Ciberseguridad por ponerse a mi disposición en forma inmediata a raíz de las amenazas y extorsiones que sufrí hoy. Todo en manos de la Fiscalía Cibercrimen, por su inmediata intervención y preocupación!», expresó el conductor de Los Ángeles de la Mañana en su cuenta de Twitter.
Como ya dijimos, De Brito no es el único famoso víctima de las extorsiones virtuales. Este mismo viernes Pampita avisó que le hackearon su cuenta de WhatsApp. «Ya hice el reclamo, pero va a Estados Unidos, tarda más o menos, entre que va, lo aprueban y todo, pero ya me pasó muchas veces. Con el Facebook, el mail, el Instagram, con todo», contó la conductora en una nota con LAM.
