En el primer debate antes de los comicios de segunda vuelta del 30 de octubre, el presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, y el exmandatario Luis Inácio Da Silva intercambiaron fuertes acusaciones, que entre otros temas, giraron en torno a la pandemia, la corrupción y la delincuencia.
Bolsonaro le dijo a Lula que es una «vergüenza nacional» al emparentarlo con la corrupción, mientras Lula lo calificó de «dictadorcito«.
En el encuentro organizado por la cadena Bandeirantes, mientras Bolsonaro intentó relacionar a Lula con el crimen organizado, al sostener que visita favelas, y con presidentes a los que califica como populistas de izquierda como el argentino Alberto Fernández, el líder del Partido de los Trabajadores acusó a líder derechista de «negligencia» en el tratamiento de la pandemia.
“Usted se rio, imitó a personas muriendo asfixiadas. No hay nadie en la historia que se haya burlado de la pandemia como usted”, le dijo Lula a Bolsonaro.
«Ningún gobierno en el mundo tuvo a alguien que jugara con la pandemia y la muerte como usted jugó”, espetó Lula, mientras acusó a Bolsonaro de retrasar la llegada de la vacuna.
«Su negligencia provocó la muerte de 600 mil personas cuando se podría haber salvado más de la mitad”, acusó. Bolsonaro recordó que Brasil “fue uno de los países que más vacunó en el mundo y en tiempo más rápido” y pidió a su contrincante que «pare de mentir”.
“Lula está enamorado de Fidel Castro, Maduro, entre otros dictadores. ¿Qué hay de común entre Lula, Ortega, Chávez, Maduro, Evo Morales, Fernández de Argentina, Petro de Colombia? Son del Foro de San Pablo, son todos amigos. Miren para donde están yendo esos países”, expresó el presidente.
Además, el actual presidente hizo alusión a la situación económica social de la Argentina para atacar a su rival. “Miren para donde está yendo nuestra Argentina. Fernández, cuando era candidato, fue a visitar a Lula a la prisión en Curitiba. Miren cómo está la economía de Argentina, 40% del pueblo está en la línea de la pobreza. Revisan basurales para sobrevivir. ¿Eso queremos para Brasil? Poner personas como esas, sin ninguna calificación para conducir el país”, advirtió Bolsonaro.
El presidente le dijo a Lula que tiene afinidad con narcotraficantes y recordó que tuvo cuatro de cinco votos en las cárceles. En la primera vuelta de las elecciones brasileñas, Lula se alzó con la victoria con el 48,4% de los votos, sobre el 43,2% de Bolsonaro, en una elección en la que el presidente tuvo mejor desempeño del que le auguraban los sondeos.
Según la última encuesta del Instituto Datafolha difundida el viernes último, el candidato del Partido de los Trabajadores (PT) obtiene el 49% de las intenciones de voto, a cinco puntos de Bolsonaro, con 44%.