El Departamento de Salud Pública en Florida (DOH Charlotte, por sus siglas en inglés), en el condado de Charlotte, alertó a la comunidad sobre la contaminación del agua en la ciudad. Esto luego de que un hombre muriera al contraer una bacteria “come cerebro”.
El trágico hecho ocurrió el pasado 20 de febrero, tres días antes de que las autoridades sanitarias del condado emitieran una alerta pública por la infección. Se trata de una ameba unicelular que vive en el agua, llamada Naegleria flowleri.
Según las autoridades, el hombre que no ha sido identificado, contrajo la bacteria cuando se practicaba lavados nasales con el agua del grifo. DOH Charlotte, dijo que es una infección rara que solo puede ocurrir cuando el agua contaminada ingresa por la nariz. El departamento aseguró que no se contrae bebiendo el agua del grifo.
Autoridades sanitarias piden a la comunidad tomar precauciones
El departamento de salud de Florida, pidió a la comunidad que extremen las precauciones al bañarse y lavarse la cara. En ese sentido, recomendaron hacerlo con agua destilada o esterilizada, sobre todo en el caso de los niños.
La ameba causa una infección cerebral conocida como meningoencefalitis amebiana primaria, que no cuenta con tratamientos médicos efectivos. Es muy peligrosa y mortal, por lo que la persona que contrae la bacteria tiene mínimas posibilidades de vivir.
Este tipo de infección mata al 97% de las personas que la contraen. Desde el año 1962 hasta el 2021 se habían registrado 154 casos de esta infección. De ellos, solo 4 personas lograron sobrevivir.
Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC, por sus siglas en inglés), dijeron en un comunicado a Fox 4, que este es el primer caso en Florida, en que una persona se infecta a través del agua del grifo. También es la primera infección por Naegleria fowleri presentada en el 2023.
El CDC indicó que la ameba vive en cuerpos de agua dulce y cálida como lagos, ríos y aguas termales. Agregaron que puede estar presente en sedimentos en el fondo de estos. Por ello, la agencia recomienda no excavar ni remover la tierra de estas aguas tibias y con poca profundidad.
