Una de las nuevas polémicas que estalló recientemente en el mundo del espectáculo puso en el eje de las miradas a Luciana Salazar y Martín Redrado, ya que la modelo acusa al economista de no hacerse cargo de su paternidad sobre Matilda Salazar y, en esta oportunidad, lo tildó de ser una “persona perversa”.
Salazar lleva adelante una demanda por paternidad ya que el economista niega tener algún tipo de vínculo con la menor que fue concebida a través de un proceso de subrogación de vientre. Por su parte, la mediática sostiene que el ex presidente del Banco Central firmó documentos que lo identificarían como “padre a fin”.
Por tanto, la modelo sostuvo: “Sigue contestando con mentiras en una situación tan delicada como son los derechos de una menor que están siendo vulnerados nuevamente. Hablamos de una persona totalmente perversa”.
Al tiempo, Salazar acusó a Redrado de ser “violento” y añadió: “Lo que le hace a la menor, y me genera en consecuencia, es inexplicable”. Sin guardarse nada, la mediática apuntó: “Primero, mintió con todo. Están las pruebas”.
“Dijo que no había firmado nada y compartí un fallo donde en su declaración dijo que se iba a hacer cargo hasta la mayoría de edad de la nena que, para él no tenía responsabilidad y miente que no firmó ningún acuerdo ante la escribana pública, ni es deudor alimentario”, continuó.
Además, la mediática remarcó que Matilda no recibe dinero “más allá de las artimañas” y apuntó: “No es plata porque se trata de vivienda y colegio. No reclamo plata para mi, él tiene una deuda con la menor que no tiene nada que ver conmigo. Lo único que hago, es hacer valer sus derechos porque soy su representante”.
“Es una persona que tiene facilidad con la justicia desde muchos aspectos -refirió, además, al cambio de nombre- y eso me genera mucho temor porque la justicia está lenta ante la vulneración de los derechos de una nena”, continuó.
En este sentido, calificó al economista como “Macabro, sin lugar a dudas” y explicó: “Más allá de lo económico, desde el lado sentimental hacia la nena, yo no reclamo nada sentimental hacia él porque no quiero saber nunca más nada, pero al jugar con los sentimientos y abandonarla, desde el lado moral es macabro. No sé cómo puede dormir tranquilo. Una nena no es un envase descartable”.(NA)
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