
El programa, que arrancará en septiembre, está destinado a jóvenes que están transitando la última etapa de un tratamiento por consumo problemático y adicciones, de al menos seis meses de duración, en algún espacio de la red territorial de la Sedronar. Se implementará en todo el país a través de los dispositivos estatales y de organizaciones de la sociedad civil.
Cómo se implementará el proyecto
- En primer lugar, y como condición excluyente, los beneficiados deben asumir el compromiso de que continuarán con el tratamiento.
- Los jóvenes tienen que participar de las actividades del espacio o dispositivo en el que realizan el tratamiento (algunos son residenciales; otros, ambulatorios) y tienen que asumir responsabilidades propias y con los demás en esos lugares: eso significa formar parte de la red de trabajo diaria de la institución, como cocinar, llevar comida, hacer trámites y/o mandados, acompañar a un compañero al médico, gestionar un DNI, buscar medicación, acompañar a otros en un taller y coordinar grupos, entre otras actividades. Cada tres meses habrá una certificación de tareas.
- Es importante que los hombres y mujeres en tratamiento retomen sus lazos familiares y afectivos.
- Transcurrido el año, se realizará una evaluación interdisciplinaria junto a la persona para comenzar a definir los primeros lineamientos de su proyecto de vida hacia el futuro. Allí puede elegir cambiar de línea dentro del programa Potenciar Trabajo – que tiene como objetivo contribuir a mejorar el empleo y generar nuevas propuestas productivas a personas que se encuentren en situación de vulnerabilidad social y económica -, finalizar sus estudios primarios o secundarios, realizar alguna capacitación en el marco de la Formación Profesional o sociolaboral, o incluirse en alguna línea socioproductiva o sociocomunitaria.
- (Fuente La Nación) MAC