La administración del condado de Miami-Dade dio inicio a la primera etapa del proyecto reestructurado de movilidad denominado «Improved Bus Network (IBN)» con el objetivo de reducir los tiempos de espera en las paradas de autobús.
El sistema de autobuses del condado ha sido rediseñado para ampliar las rutas más utilizadas y confiables.
Entre los cambios más destacados del nuevo esquema de movilidad se encuentra la conexión entre South Dade Government Center y la estación del Metrorail de Dadeland South a través de la ruta 39, con autobuses pasando cada 12 minutos como máximo.
La ruta 62 también mejorará su frecuencia, con esperas máximas de 15 minutos en días laborables. Por otro lado, la ruta 26, anteriormente conocida como Ruta B, también se verá favorecida, aumentando su frecuencia a un autobús cada 30 minutos y eliminando su recorrido por Harbor Drive. En contraste, la ruta 31 dejará de estar en servicio.
Además, la ruta 38, que se extiende desde Florida City hasta la terminal del Metrorail en Dadeland South, ahora contará con autobuses cada 15 minutos, lo que facilitará la movilidad de los pasajeros en cualquier momento del día o de la semana.
Estos cambios mejorarán considerablemente el servicio de transporte público en Miami-Dade y facilitarán el desplazamiento de los residentes por el condado.
Este rediseño tiene como objetivo mejorar la calidad y la confiabilidad del servicio al adaptar las rutas a la demanda, optimizar la distancia entre paradas e implementar medidas de prioridad de tránsito. Esto resultará en autobuses más frecuentes y rápidos, con prioridad en el tráfico, lo que hará que el transporte público sea más atractivo y accesible para los usuarios. A su vez, contribuirá a reducir la congestión del tráfico y a mejorar la calidad del aire.
Entre las ventajas generales de este nuevo sistema de autobuses se encuentran:
- Mejorar el acceso al trabajo en un promedio del 31%, lo que permitirá que más personas lleguen a sus destinos de manera eficiente.
- Incorporar nuevos servicios frecuentes con intervalos de espera de menos de 20 minutos, lo que hará más atractivo el uso del transporte público en el condado.
- Contribuir a reducir la congestión del tráfico al ofrecer una alternativa al uso del automóvil.
- Permitir que los autobuses lleguen más rápido a su destino y tengan prioridad en el tráfico.
La alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, afirmó en declaraciones a Diario Las Américas que este proyecto mejorará significativamente la calidad de vida de los residentes al enfocarse en la frecuencia de los viajes y crear un mejor acceso al trabajo, la educación, la atención médica y una mejor calidad de vida.
La Fase II del proyecto se implementará el 13 de noviembre de 2023 e incluirá una reducción del 4% en el servicio debido a la escasez de conductores, principalmente las reducciones de servicio ya existentes formalizadas.
Para obtener más información, se puede visitar la página oficial del condado, donde se detalla cada ruta en específico.
