El kirchnerismo prevé una tragedia electoral y proyecta qué hacer con Alberto el día después

Los encuestadores que no trabajan para ningún partido arrojan resultados muy negativos para el oficialismo.

El kirchnerismo prevé una tragedia electoral. Alberto Fernández gritando al micrófono lo que unos miles escuchan en vivo y varios millones en las redes: «No nos vamos a arrodillar ante el FMI». Alberto Fernández, rogando apoyos en el G20 para renegociar la deuda y terminando una reunión con Kristalina Giorgieva con la frase: «fue un buen diálogo», es decir, no pasó nada, estamos igual que antes.

Ese grado de contradicción es el presente de la totalidad del Gobierno por lo que se genera una incógnita «¿Cómo seguimos después del 14?», y se multiplica en los despachos oficiales, convencidos que ya nada que se haga resultará para revertir un resultado implícito

Un consultor que antes fue político, muy cercano al Frente de Todos dice: «Hay algo que tenés que tener en cuenta siempre, el momento en que la gente dejó de culpar al gobierno anterior por lo que está pasando y empezó a culpar al actual. Eso a Alberto, le pasó hace más de un año, por eso cuando meten a (Mauricio) Macri en la campaña no pasa nada».

El kirchnerismo prevé una tragedia electoral y proyecta qué hacer con Alberto el día después

El hecho es que el impulso de los recambios impuestos por Cristina después de la semana crítica post PASO, se va desvaneciendo. Las medidas anunciadas por ahora son eso, anuncios que no llegaron a la gente. La hiperactividad de Juan Manzur mermó: «¿Qué más querés que haga el tipo? Le metió con todo pero nada sale, el 15 o el 16 de Noviembre, el avión sanitario de Tucumán lo lleva rápidamente de vuelta al sillón de gobernador, ya bastante pegado quedó al fracaso ajeno», dice con tonada, un hombre cercano al actual jefe de Gabinete.

Hay desasosiego electoral y una posibilidad que tome el timón Cristina definitivamente. En el kirchnerismo hay opiniones divididas, alzarse con el Gobierno y terminar con toda influencia del presidente, que quede en un papel decorativo, «como el rey de España» dicen y tratar de encarrilar el Gobierno de cara a 2023 con cristinismo explícito, es una opción. La otra, tanto o más dramática que la anterior. «Nos vamos todos, que termine él si puede, esto es su responsabilidad, su torpeza nos llevó hasta acá, que se arregle, que dure si puede», brama, furioso, un kirchnerista de la primera hora, que nunca se bancó al presidente.

Cualquiera de ambos escenarios es complejo para la Argentina. Pese a lo que dicen todas las encuestas sobre Cristina y Máximo y sus problemas de imagen pública, el Círculo Rojo no sabe qué tipo de gobierno haría Alberto sin el apoyo K. «¿Vos contaste la cantidad de diputados propios tiene este hombre en el Congreso? A mí la suma me da cero» dice un encumbrado empresario argentino, que completa: «¿Y cuantos funcionarios capaces de gestionar en el Ejecutivo son albertistas? La suma me da cero de vuelta», explica.

Al respecto, nadie quiere el rumbo kirchnerista para la economía y la gestión, pero suponen que el albertismo directamente carecería de rumbo este es el dilema.

El kirchnerismo prevé una tragedia electoral y proyecta qué hacer con Alberto el día después

En cuanto a las encuestas, los problemas que la gente responsabiliza al Gobierno son irremontables de hoy al 14 de Noviembre. De hecho, la crisis económica no se puede paliar con un poco de «platita» que encima no llega. Depende que trabajo de campo se mire, el rechazo a votar oficialismo está basado en lo económico entre un 35% y un 50%.

En el kichnerismo aseguran que Alberto Fernández no tiene ningún tipo de rumbo. Una encuesta de la Universidad de San Andrés difundida la semana pasada, dice que el 80% de la gente se vio influida en el sufragio por las fotos del cumpleaños de la primera dama, Fabiola Yáñez en plena cuarentena, y ese evento puntual y casi ridículo, sigue siendo motivo de facturas internas de alta intensidad. Cada vez que un artículo periodístico o una medición saca a relucir el tema, aparece la furia K

Encuesta: la imagen de Cristina Kirchner sigue en picada, incluso por debajo de Macri

En definitiva, los estudios más serios en la provincia de Buenos Aires, oscilan entre una recuperación de un par de puntos que de todas formas es una gran derrota, hasta una ampliación de la diferencia a favor de Juntos.

En CABA, es claro que María Eugenia Vidal incrementará el margen, en Santa Fe, Carolina Losada podría llevarse la elección por 10% de ventaja, especialmente después que al gobernador Omar Perotti se le ocurrió ir a una marcha contra la inseguridad y fue sacado de allí entre insultos y agresiones.

Córdoba va a ser una paliza de antología, no solamente a los K, también al gobernador Juan Schiaretti, porque el peronismo parece estar pagando los costos de la situación sin distinciones de credo interno, todo ello sin contar otras provincias con incidencia nacional como Mendoza y Corrientes.

Por otra parte, la encuesta sorprende a Javier Milei y preocupa a Horacio Rodríguez Larreta. Sin embargo hay una certeza y una duda. La derrota es certeza y la duda es cómo se sigue y esto último es lo que nadie puede responder.(IProfesional)

LA

Acerca de Oscar Posedente 12821 Articles
Periodista, locutor, actor y editor de Semanario Argentino y de Radio A de Miami. Director de Diario Sur Digital.