El representante de jugadores Walter Bottini defendió la llegada de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD) al fútbol argentino al señalar que «en el país ya existen desde hace años con otro nombre», al tiempo que cuestionó a los clubes más poderosos que se niegan a esta iniciativa.
«Los más negadores de esta posibilidad son los clubes más poderosos. La realidad indica que todos los clubes denominados chicos tienen necesidades. Si un grupo empresario te resuelve un problema y se puede hacer un trabajo a largo plazo proyectando buenas ideas se puede ejecutar muy bien», explicó Bottini, quien destacó el trabajo del empresario Guillermo Tofoni.
En declaraciones a la Agencia Noticias Argentinas, explicó que las SAD «son una figura de sociedad mixta y no privada», al tiempo que remarcó: «En el fútbol argentino ya están implementadas, pero se utilizan otras palabras para encubrir lo que sería una SAD, como
por ejemplo el gerenciamiento».
«Diego Lemme como presidente de Defensa y Justicia hace un gran trabajo y ahí también destaco a Cristian Bragarnik, que ofrece jugadores y que se convierte así en un recurso para estos nuevos clubes. Estudiantes, más allá que no logró ser un equipo protagonista o avasallante o que los jugadores te hayan deslumbrado en relación a las incorporaciones que trajo el empresario Foster Gillett, logró generar una retención de talentos como el caso de Cristian Medina».
Asimismo, añadió: «Medina se fue de Boca y gracias a la intervención de fondos privados a través de un empresario se retuvo a un futbolista que hoy se hubiera perdido en la liga de Rusia. También se repatrió a Facundo Farías que estaba en la MLS».
«Hoy Andrés Fassi, presidente de Talleres de Córdoba, lo tiene como un club social y logró llevarlo a lo más alto porque formó jugadores, transfirió a otros a Europa, fue campeón, compitió en el plano local y es directorio de accionistas privados como el Grupo Pachuca. Y se ve que funciona bien de las dos maneras, ya que conviven ambas ante la necesidad y ante una elección. Para mí es el modelo a seguir», explicó.
Además, detalló: «Dentro de los acuerdos privados está la gente que quiere venir a invertir. Bienvenida sea porque esto es una industria que tiene la posibilidad de que fondos extranjeros inviertan en el país, en la industria para generar este tipo de contenidos y que la gente pueda disfrutar mas tiempo a jugadores que deberían haberse ido o repatriar a otros».
Bottini, quien mantiene conversaciones con algunos clubes de Primera División para poder acercar jugadores de cara al segundo semestre del año, consideró que «el fútbol argentino atraviesa un cambio y se necesita logística, profesionalizar las áreas dentro de un club, dejar de lado el amateurismo y poner gente capaz».
«Y para eso necesitas inversión», indicó y pidió que «se desinstale el miedo que muchos se encargaron de ponerle a las SAD».
Además, indicó: «Hay clubes poderosos que tienen distintas realidades y además son una marca país hacia el mundo. Por eso tienen muchos más recursos e ingresos económicos, lo que genera un desequilibrio financiero en los planteles a la hora de competir».
«La negativa está y seguirá estando para los principales clubes, pero la realidad nos dicen que los aportes privados llegaron para quedarse y ayudar a quienes necesiten de inversión», cerró. (NA)
