El Congreso del estado de Florida aprobó un proyecto de ley, impulsado por el gobernador Ron DeSantis, que permitiría la reubicación de migrantes hacia otras regiones del país.
La Cámara de Representantes, de mayoría republicana, dio la aprobación final en una votación en bloques partidistas.
La propuesta había recibió el visto bueno del Senado la semana pasada, y ahora pasará a manos del gobernador para que lo promulgue, y por lo tanto, lo convierta en ley.
En caso de que DeSantis apruebe el proyecto, Florida podrá reubicar migrantes en otros estados, tal como lo hizo el mandatario el año pasado, cuando envió a un grupo de ciudadanos de distintos países sudamericanos a Martha’s Vineyeard, en el estado de Massachusetts para protestar contra la política de inmigración que lleva adelante la administración del presidente Joe Biden, de origen demócrata.
Además, la normativa contempla penas de hasta 15 años de cárcel a quien transporte a Florida inmigrantes en forma irregular, así como multas a empleadores que contraten a indocumentados.
El texto establece, asimismo, la obligatoriedad de los hospitales y centros médicos de Florida de recoger información sobre el estatus migratorio de sus pacientes, y también anula las licencias de conducir emitidas a indocumentados en otros estados.
Kirk Bailey, director político de la filial en este estado de la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU, según su sigla en inglés), subrayó que «Casi el 20 por ciento de los floridanos son inmigrantes. Un proyecto de ley que daña directamente a una quinta parte de nuestra población no tiene cabida en nuestro estado. Este proyecto de ley es vergonzoso».
DeSantis se apresta a aprobar la nueva ley mientras se prepara para lanzar su candidatura presidencial por el partido republicano, aunque en ese caso debería a ir a una elección interna con Donald Trump, quien anunció meses atrás su intención de retornar a la Casa Blanca.
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