El impacto Milei:. Se llevó a cabo una encuesta para evaluar la primera semana de Javier Milei y analizar cómo impactó en la sociedad el anuncio del ajuste. El sondeo de opinión pública registró las transformaciones en la percepción del presidente desde antes del balotaje, tras la victoria y el inicio de su gestión, marcado por las medidas anunciadas por el ministro Caputo. Se exploraron las fortalezas y los riesgos de un plan ultraortodoxo.
Asumido. El presidente Milei saluda desde los balcones de la Casa Rosada, el domingo pasado. Fue una semana vertiginosa donde se delinearon con claridad los pilares del plan de Javier Milei: un enfoque económico ultraortodoxo fundamentado en un dólar elevado, la reducción del gasto público, aumentos de tarifas, congelamiento de ingresos y la liberalización de los mercados. A pesar de que esta receta no resulta ajena a los libros de economía, se presenta como desconocida para una sociedad acostumbrada a dos décadas de gradualismos, controles de precios y subsidios cruzados. La incógnita es cómo reaccionó la sociedad ante esta nueva realidad.
Una encuesta realizada recientemente por Federico Aurelio (Aresco) comienza a arrojar luz sobre el impacto en la sociedad de un plan de ajuste riguroso propuesto durante la campaña por el líder de La Libertad Avanza. Ahora, dicho plan comienza a implementarse, con notables aumentos en los precios de alimentos, servicios, combustibles y un encarecimiento general de la vida cotidiana.
La encuesta, llevada a cabo entre el Miércoles y el Viernes, abarcó 4,000 casos en todo el país, con el objetivo de medir la reacción del público a los anuncios del ministro de Economía, Luis “Toto” Caputo, y cómo estas medidas afectaron la imagen de Milei, días después de asumir la presidencia.
En una entrevista con Infobae, el director de la consultora Julio Aurelio-Aresco destacó que la imagen de Javier Milei experimentó un aumento del 6% en los primeros días después de asumir, sumando un crecimiento total del 11%. Según los datos de la encuesta de Federico Aurelio, la imagen del líder libertario se distribuye de la siguiente manera: la positiva más la regular positiva alcanza el 61%, mientras que la negativa y la regular negativa asciende al 31.5%.
En cuanto a la imagen favorable, es relevante examinar su composición. Entre muy buena y buena, el porcentaje se sitúa en torno al 53%. Milei accedió a la presidencia después de obtener el 30% de los votos en la primera vuelta (7.8 millones de sufragios) y ganar cómodamente el balotaje con el 55% de todos los votos (14.5 millones de sufragios), según datos de la Cámara Nacional Electoral. Las primeras encuestas sugieren que ese «voto prestado», mayoritariamente de Juntos por el Cambio y de Juan Schiaretti, tiende a consolidarse.
Respecto a las opiniones regular positiva y negativa, existe una zona gris del 20% que oscila entre el apoyo crítico y el rechazo moderado. La encuesta también identifica un 19.5% de anti Milei, donde podrían encontrarse el kirchnerismo duro y la izquierda, que se han convertido en expresiones político-electorales minoritarias este año.
El impacto del ajuste En la conversación con Infobae, el hijo del reconocido encuestador Julio Aurelio resaltó que la encuesta buscó monitorear la reacción de la gente ante las primeras medidas implementadas por el nuevo gobierno desde el Palacio de Hacienda y el Banco Central. Estas medidas incluyeron una reducción sensible de la burocracia estatal. «Había dudas, en el marco de la crisis del país, sobre si Milei iba a lograr generar expectativas positivas, y lo que se observa es que lo está logrando. Tiene un claro respaldo de la opinión pública en estos primeros días», afirmó.
«La gente es consciente y coincide con él en el análisis del presente. Pueden tener alguna diferencia, pero la frase del discurso inaugural que dio afuera del Congreso Milei, diciendo que esta es la peor herencia económica de la historia, la gente le creyó. A partir de ahí, también adhieren al concepto de la necesidad de un ajuste. Estamos hablando de un apoyo en torno al 60%», continuó Federico Aurelio. Agregó que «a partir del ajuste, Milei retiene una alta credibilidad respecto a que la situación económica va a mejorar y que, con su equipo económico, la situación se va a revertir».
Sin embargo, el encuestador advirtió que, aunque la gente coincida en la necesidad de ajustes y en la importancia de cambiar las cosas, la mayoría de la sociedad cree que «si las medidas van a afectar el bolsillo, deben hacerse de la manera más gradual posible».
«Seis de cada diez hogares aseguran que no pueden, que no están en condiciones de achicar gastos, de ajustarse en sus casas. Es una porción minoritaria la que responde que sí puede hacerlo y que lo va a hacer. El gran dilema que aparece es cómo va a equilibrarse la vocación de ajuste y de acompañamiento a Milei con el razonamiento de que consideran que el bolsillo no puede ser ajustado», planteó Federico Aurelio en la entrevista.
En este punto, entra en juego un actor social con una dimensión política, ideológica y electoral, pero sobre todo relacionada con la situación económica. «Hay un tercio de la población que está dispuesto a hacer ajustes incluso en su bolsillo y que dice que es necesario el cambio. Ese es el núcleo duro de acompañamiento de Milei, que dice que va a acompañar y, a su vez, tiene alguna capacidad de maniobra para realizar ajustes en su hogar», afirmó el director de Aresco.
Federico Aurelio continuó: «Después hay otro tercio que no está de acuerdo con los cambios y mucho menos va a estar de acuerdo con que le metan la mano en el bolsillo. Y, por último, hay un tercio que está de acuerdo con que hay que hacer cambios, está de acuerdo con que hay que hacer ajustes, pero pretende que se haga con la mayor gradualidad posible y afectando el menor tiempo posible su calidad de vida. Este tercio va a definir si hay un acompañamiento mayoritario o no».
Según la perspectiva de este segmento crucial, su característica definitoria «es su realidad económica, no política». «Políticamente forman parte del 55% que votó por Milei, pero lo que realmente determina si están en el tercio de apoyo o no es la cuestión económica. Han tomado un conjunto de decisiones, y aunque la mayoría está más de acuerdo que en desacuerdo, aquellas que generan mayor desacuerdo son precisamente las que afectarían de manera significativa a la población», explicó el experto en opinión pública.
Una por una, se detallan las medidas de Emergencia Económica anunciadas por Luis Caputo. Entre ellas se incluye la eliminación de subsidios al transporte, la energía, las tarifas y las boletas que llegan a todos los hogares. Esto, combinado con un proceso que ya ha adoptado una dinámica hiperinflacionaria, impacta de manera cotidiana en las góndolas, con aumentos de precios y escasez de mercaderías. «Se reconoce el ajuste que realiza el Estado, pero está el otro ajuste que los argentinos vienen experimentando y que ha comenzado a intensificarse con el aumento de la inflación», advirtió Federico Aurelio.
Para concluir el análisis, el director de Aresco subrayó: «Persiste una incertidumbre en torno a este dilema, ya que hay una disposición a respaldar a Milei, quien se encuentra en una posición sólida y goza de credibilidad. Sin embargo, queda por verse cómo se mantiene esa disposición frente al impacto de la intensificación de la inflación. La principal preocupación que prevalece hoy entre la gente es el precio de los alimentos, bebidas y los gastos del hogar, especialmente el alquiler. En medio de esta inflación galopante, esto podría generar un deterioro en el ánimo social».
«Hay respaldo porque existe un entendimiento de que la crisis es muy grave y es necesario implementar el ajuste. Aunque nadie favorece el ajuste, creen que esta es la forma de intentar resolver de una vez por todas los problemas. No obstante, el límite se encuentra en la inflación y los precios», concluyó.
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