Triunfo sobre la adversidad. Jey Mammon volvió a los escenarios teatrales, y una persona del público le lanzó una frase que lo conmovió: «Ya está».
El humorista presentó su unipersonal en Carlos Paz, titulado «Enseguida Vuelvo», marcando así su retorno a los escenarios y a los medios después de que salieran a la luz las acusaciones de abuso sexual realizadas por Lucas Benvenuto, lo cual lo llevó a aislarse durante varios meses.
Hacia el final de la obra, Jey Mammon expresó palabras de agradecimiento por el apoyo recibido, destacando el hecho de estar de nuevo frente al público antes de que concluyera el año. Se mostró a gusto con la calidez del público presente en el teatro.
Dirigiéndose a la audiencia, reflexionó sobre el vínculo que ha construido con las personas que, a pesar de las críticas sociales del inicio del año, asistieron a su función. Explicó: «Ahora comprendo quién es mi público y qué debo a mi audiencia».
Reconoció la dificultad que experimentó al subirse al escenario y realizar el espectáculo, confesando el miedo que sentía ante la posible reacción del público: «Fue una noche muy especial, lo dije al principio del texto, me costó mucho empezar». En ese momento, el conductor ya estaba visiblemente emocionado, con lágrimas en los ojos y dificultad para hablar. Fue entonces cuando un hombre en la audiencia aprovechó el silencio para brindar palabras de aliento a Jey Mammon, instándolo a continuar con su discurso.
«Ya está, papá», exclamó la persona en un gesto de apoyo al comediante. Entre otros elogios como «te queremos» y aplausos, Jey Mammon agradeció con un gesto y trató de retomar sus palabras, aunque la emoción le ganó.
Este episodio se produce después de que Lucas Benvenuto compartiera una antigua foto junto a Jey Mammon como respuesta al regreso del comediante al teatro, utilizando la imagen para destacar las edades de ambos en ese momento: 14 y 31 años. En sus redes sociales, Benvenuto realizó un contundente comentario sobre el daño sufrido, expresando su deseo de dejar atrás ese pasado. Afirmó que la vida sigue para él y concluyó con la reflexión de que lo que no te mata, te hace más fuerte, agradeciendo el apoyo recibido.
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